No recordaba que hoy se celebra el nacimiento de Cervantes. Un 29 de setiembre, pero de 1547, y en Alcalá de Henares, es la fecha que tradicionalmente se considera la más fiable para situar al autor en este mundo.
Curiosamente mi día también ha estado marcado por Cervantes. Y como no por su obra cumbre “El Quijote”.
Sí cosas del destino. Lástima que el destino no me depare (espero que de momento) otras cosas más interesantes que reencontrarme con esta novela, once años después de haberla leído por primera vez.
Recuerdo a la profesora que nos la presentó como temario casi único en una asignatura de primero de carrera. Y también recuerdo como un colega de departamento, al saber de “tan grata lectura” nos dijo que éramos unos privilegiados. “Nunca volveréis a acercaros a esta gran novela como lo haréis ahora. Con la inocencia y la candidez de quién la leer por primera vez. Os envidio y me sentiría muy orgulloso de estar en vuestro pellejo ahora”.
Por aquel entonces yo ya tenía bastante desarrollado el humor irónico y algo soscón que ahora ya es como un organismo parasitario que se mueve a sus anchas en mí. Me reí. Me reí mucho y con muchas ganas.
En casa circulaba una edición antigua, de esa de tapa dura con letras en oro. Tenía más años que yo y mi hermana juntas.
Empecé a leerlo, y la verdad, no sé en qué nos envidiaba mi profesor. No os engaño al decir que, literalmente, me quedaba frita encima del mamotreto. Será toda la gran obra maestra de la lengua española, y fundadora del género de la novela. Peeeeero… A servidora le pareció un soberano tostón.
Cual fue mi alegría, el lunes pasado, cuando recibí un correo de uno de mis profesores durante este semestre. Una alegría mayúscula: para esta primera parte del curso vamos a leer “El Quijote”.
No me dio por llorar porque estaba con fiebre y ya estaba llorando por lo mal que me encontraba. ¡No me lo podía creer! ¡Otra vez no me podía estar pasando! Pues sí. Era real, muy real. Extremadamente real.
Tanto como que hoy de dos a cuatro de la tarde he tenido que “sufrir” de nuevo, una clase sobre El Quijote. La obra que nos muestra: el loco cuerdo; el último soñador del mundo antiguo; el que “desface entuertos”; la parodia de los libros de caballerías; la sátira de la literatura de la época; los últimos coletazos del mundo “antiguo” y la inminente llegada de la industrialización; las lecturas simbólicas del romanticismo… Eso que en esencia es tan interesante, pero que a mi me tiene un poco harta y aburrida. El Quijote hasta en la sopa cansa, cansa bastante, y acabas atragantándote con él.
Sí lo sé. Ahora me echaréis a los leones por decir que no me gusta El Quijote. Pero es inevitable. Por lo menos para mí, que aunque le ponga todas las ganas, me quedo frita delante del libro.
Pero es que agarraros…. Lo peor de todo viene cuando lees esto: “In a village of La Mancha, the name which I purposely omit, there lived not long ago, one of those gentleman, who usually sep a lance upon a rack, an old target, a lean horse, and a greyhound for coursing”.
Por poco me caigo de la silla en medio del aula. Yo, la que además de llegar tarde (otra vez la organización ha brillado por su ausencia y nos han mandado al quinto pino a mano derecha en un campus grande grande como un día sin pan), no ha podido callarse esa boquita que tiene y le suelta al profe: “Mmmmm yo me lo he leído en español, hay algún problema?” A lo que me responde: “En español de la época?”. Y yo: “Mmmm sí, no es difícil de entender. Por qué?” A lo que vuelve él a responder: “Porque tienes mucho valor de enfrentarte al español del siglo diecisiete en una novela tan larga”.
A mi se me ha pasado otra palabra antes que “valor”. Más bien le hubiera puesto “pachorra” de volver a leer ooootra vez el mismo tostón.
Ya me ha fichado. Él y el resto de compañeros. “La repelente que se lo ha leído en español. La Erasmus rarita que se atreve a opinar sobre la novela. La bocazas que ha acertado las preguntas que ha lanzado el profesor al aire, durante la clase.”
Aunque no os negaré que, por primera vez en bastantes días, no me he sentido estúpida y fuera de lugar.
A pesar de las interferencias de un inglés con acento algo raro para mí, el profesor ha acabado fijándose casi exclusivamente en mi cara a la vez que iba desplegando sus teorías sobre el libro.
Pobrecito mío. El interés que ponía yo no era por el libro, sino por entender el inglés con acento indescifrable que hablaba y poder practicar yo un poco el mío chapucero.
Es que si ya es una pu… que tenga que volver a leerme el libraco, aún lo es más que tenga que ser la versión “Made in London”.
Virgencita, virgencita, que me quede como estoy. Vaya a ser que me de un aire de esos traicioneros y termine por gustarme…
lunes
DON QUIJOTE "MADE IN LONDON"
Esta mañana, cuando me he conectado al buscador Google ha aparecido esto.
Publicado por emma woodhouse en 19:01
Etiquetas: De cosas del día a día, De gustos
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5 comentarios:
Bueno, seguro que ya tienes aprobada esta parte del curso.
A mi ayer también me sorprendió ver esa imagen en el Google, justo cuando iba a trabajar con los niños los personajes de la serie de animación de Don Quijote.
El libro un verdadero muermo. Lo leí en 3º de BUP y suerte que no fueron todos los capítulos.
I hope you have a nice day.
Lots of kisses :)
Ves, ya los has encandilado jeje!!
Yo como Krambis sólo me leí algunas partes en 2º o 3º de BUP y no lo he vuelto a tocar.
KRAMBIS: la imagen me dió que pensar, y luego me hizo caer en el aniversario.. Ni hecho a posta vamos... Y si hijo sí un soberano tostón.
LUCÍA: Encandilado... mmmmm no sé, igual sí (hay que subierse el autoestima leches! XP)... pero ya te digo yo que con mi inglés seguro que no...
Jajaja. ¿Y no te has sentido algo Quijote? Además, ¿no lo usas en eso de los cuerdos locos? Si vas a tener más de Quijote de lo que crees.
Bueno, para que te animes (o caigas de culo) yo no sólo leí el libro en tercero de BUP (creo que era en tercero, no en COU), sinó que hice un trabajito sobre sus refranes. Y no como otros compañeros, que se dedicaron a picotear de estudios anteriores, no, sinó que iba buscand los refranes. Y creo que me perdí la mitad. aun recuerdo lo mucho que me lo curré para ese trabajo, pero me lo pasé muy bien y saqué una nota muy alta. Y no es que el libraco me impresionara, pero como mi versión era como de los años 40, un volumen de esos que esnifarías, y me había leído una versión en cómic muy chula, y me gusta manipular libracos, a pesar de ser de ciencias, pues eso.
Aunque del insti me gustó más "Cien años de soledad". a ver si os hacen leer la versión english.
PD. Es absurdo que te miren raro por leer un libro que se supone tan importante en tu propio país.
Como cuando intentan pronunciarlo, que si 'Quihote', que si 'Sansho Pansa'... Al menos, ya de algo te sonará, y creo que ya es una ventaja, porque si me tuviera que leer yo ese libraco en inglés... no me enteraría ni del título. Bueno, tampoco puedo quejarme, pues me estoy leyendo, en inglés también, 'Catalonia, nation building without a state'...
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